Duerme mi duende, que yo tengo muchos besos, para cada trozo de tu piel, para esas manos tan suaves y bonitas. Luna cuida de el, vigila sus sueños, pero sobre todo dale un dulce beso, que yo te dejo y no me celo, eso si no te acostumbres, que yo lo quiero.
0 comentarios:
Publicar un comentario