La noche esta húmeda triste y llorosa, descargando agua y dándo a entender, el mal estar que las nubes le hacen pasar.
Cada gota limia la ciudad, le da vida a campos, bosques y flores.
El llanto del cielo, es una necesidad, que le va bien a la humanidad, a los ríos y a toda la fauna vegetal que ya tenía ganas de bailar al son de esta lluvia tan esencial.