Un adiós dulce sin ruido y con los brazos abiertos al cielo, un nuevo vacío dentro de mi corazón dejo mi abuelo, la rama mas vieja y resistente de mi familia.
En Ávila al pie de sus montañas, rodeado de su gente yace dormido, tranquilo lleno de paz.
Su alma nos mira antes de la gran despedida cuando un montón de tierra le caiga encima y lo sepulte para siempre el cuerpo inerte.
En Ávila al pie de sus montañas, rodeado de su gente yace dormido, tranquilo lleno de paz.
Su alma nos mira antes de la gran despedida cuando un montón de tierra le caiga encima y lo sepulte para siempre el cuerpo inerte.