Dos días consecutivos de noche contigo, me tienes sorprendida hacia tanto que no me buscabas, pensaba que no me querías y de repente vuelves a caminar de mi mano, a susurrarme cosas bonitas al oído, eres tú el que sabe arrullarme y enamorarme.
Que felicidad siento cuando vienes y nos podemos juntar, no sé cómo te puedo querer tanto, como me puedes hacer tan feliz y a la vez tener miedo, de todo lo que te quiero.