Bajo el techo de mi ciudad las noches ya se volvieron frías, ya no brillan igual sus estrellas y la luna tiene una cortina de niebla.
Ya se va despidiendo la estación mas feliz del año, pobres playas ahora se van quedando, tristes y desiertas. La ciudad recupero a sus gentes, las aulas a sus estudiantes, las empresas a sus empleados y las calles el ajetreo de su trafico.
Ya paso ese mes de julio y agosto de soledad, donde solo el sol y el ardiente asfalto te acompaño.