Para poder seguir y que mi corazón no se ahogue en un profundo llanto, me refugio en tu mirada, en la música suave que sale de tu garganta y en la magia que me entrega tu alma pura y blanca.
Si no fura por la fuerza que tu música me infunde, por las bellísimas letras de amor que todos los días arropan mi corazón, hace tiempo me hubiera dejo ir.