martes, 13 de marzo de 2012

ADIÓS RUISEÑOR

Donde vas mi dulce ruiseñor, que vuelas de mi corazón y no me dices adiós.
Que cielo sobre vuelas  con tu nave de metal, cuantas nubes viste pasar, de ciudad en ciudad para poderte saludar.

ALGO PARA TI

Hoy te tengo que contar cuantos años llevo mirando tus ojos, sintiendo tu corazón y escuchando tu voz, desde mi habitación. 
Hoy quiero que sepas, que eres tu mi mayor inspiración y quien cada día me ayuda a continuar, aun que no estés aquí. Me transmites amor, me llegas al corazón con esa grandísima voz, que amo yo.