sábado, 20 de agosto de 2011

LAS CIUDADES QUE TE VEN PARTIR, LLORAN POR TI


Que triste se quedo la ciudad con tu marcha
no te has ido y ya  te extraña, en que lugar
hoy dormirás que luna de ti cuidara.

En otro lugar el sol brillara cuando te vea llegar,
los pájaros en formación como una orquesta cantaran,
para ver tu sonrisa brillar y en tu corazón anidar.

Sobrevuelan con tigo la ciudad, y te acompañaron hasta el lugar
donde unos días te vas a quedar, pero todo lo que empieza tiene final
y otra ciudad llorosa dejaras cuando te vea marchar.

Los aeropuertos sienten tus pasos y en ellos tu vuelas alto, surcas cielos,
como los pájaros emigrantes que están en todas partes.

¿ COMO TE ALCANZO ?


A pesar del dolor, eres tu quien me cuida,
la fuerza que me alivia las heridas, y me llena
el corazón de vida, todos los días.

Eres como un verso amoroso, una canción
que atrapo mis sueños, y se gano mi amor.

Desde lejos me miraste, desde lejos me tocaste, y
a mi corazón llegaste.

Que puedo yo regalarte, para que tu me ames
 si todo lo tienes, fama, dinero y amor.

TE SIGO ESPERANDO

Tantos planes echos, meses de espera con la ilusión de verte llegar a mi ciudad, y cuando parecía que estábamos cerca otra vez te siento lejos.
Otra vez volveré a imaginarte en Madrid, otra vez a soñar tu llegada, a inventar como será, si un dia te animas.
Apesar del disgusto te seguiste esperando, mis labios te seguirán llamando, mis ojos y las manos te quieren en sus brazos.
Persistiré en lograrte un dia poderte abrazar, sentir que en mi piel tu perfume esta, ven por favor no te tardes mas mi corazón no resistirá un año mas.

PASE DE UN ESTREMO AL OTRO

Era de madrugada cuando tuve que salir de casa, cruce prácticamente mi ciudad en busca de una esperanza, que pronto me quitarían. De regreso la angustia y el dolor me hizo llorar, despues de un rato de llanto saque la pena de mi cuerpo y un desanimo me invadió, pero había sacado todo el disgusto de mi corazón.
Al llegar a casa descanse y al poco rato una llamada de teléfono  me dibujo una sonrisa, no podía creer lo que tenía en mis manos, un gorro de charro, estaba feliz no cabia en mi, uno de mis sueños tras diez años se cumplió.
Una bandera de Mexico, un gorro con sus colores me hizo olvidar esta maldita enfermedad, estaba feliz con el sombrero te pensé recibir en Madrid, pero tu ya no vas a benir, la tristeza  regreso y mi corazón se encogió pero ya no me quedan lagrimas y quizás sea lo mejor para que no me veas mal. Igual siempre te voy a esperar y cuando decidas venir ahi voy a estar para darte el abrazo que desde hace años estoy guardando, mi dulce, travieso y hermoso niño al que tanto quiero.